viernes, 29 de noviembre de 2013

JUEGO ACTIVACIÓN - PRECOMPETICIÓN


Este es un juego que utilizo a veces para calentar o activar a los jugadores de cara al partido del fin de semana.

Este ejercicio es ideal para trabajarlo el día antes de un partido importante para relajar al equipo haciendo un trabajo diferente pero que a la vez sirva para activar el cuerpo y la mente, coordinar movimientos generales y estar atentos a diferentes estímulos.

Descripción

Un equipo se pone dentro de un quadrado de unos 15x15m, El otro equipo se reparte por fuera del cuadrado en posesión de 3 balones fitballs.

Durante un tiempo definido, por ejemplo 5 minutos, el equipo de fuera tiene que intentar tocar con los 3 balones a los jugadores de dentro. Cuando esto pasa, el jugador tocado es eliminado y tiene que salir fuera del cuadrado. El juego acaba cuando no queden jugadores dentro del cuadrado o hayan transcurrido los 5 minutos (en este último caso contamos los jugadores que quedan dentro para determinar el vencedor).

* Para que el ejercicio dure más, el entrenador controla que cada 30 segundos pueda entrar un jugador del equipo eliminado.

Objetivos

- Aumentar temperatura corporal.
- Coordinación general.
- Atención a diferentes estímulos.
- Distensión, diversión.

Material

3 fitballs

Representación gráfica




Vídeo del ejercicio.  Entrenamiento At. Baleares Juvenil DH








viernes, 22 de noviembre de 2013

EL RENDIMIENTO FÍSICO

En este artículo voy a hablar sobre las variables (entrenables y no entrenables) que definen el rendimiento puramente físico de los futbolistas y deportistas en general. Hay que tener en cuenta que estas variables, para deportes analíticos como la natación o el atletismo serían el resultado del rendimiento final del deportista, pero no en el caso del fútbol.

En el fútbol, por sus reglas y características, intervienen multitud de factores que se relacionan entre sí, por lo que, por ejemplo, no puede entrenarse el aspecto físico fuera de un determinado contexto táctico, con unos requerimientos técnicos, para una situación y posición concreta… De ahí la famosa afirmación de Paco Seirul·lo: “la preparación física no existe como tal, sino que existe la preparación física para un futbolista, para un basquetbolista para un atleta…”.

Por lo tanto, y siguiendo en la línea de entrenar de forma integrada de este blog, voy a hablar de estas variables teniendo en cuenta que no sirven para definir o explicar el rendimiento real de un jugador de fútbol, pero sí que nos pueden ayudar a entenderlo y mejorarlo.

Conociendo las variables que se pueden mejorar del rendimiento físico del jugador, podremos dar preferencia al entrenamiento de aquellas que queramos potenciar.

Así pues, existen dos tipos de factores que determinan el rendimiento físico de un deportista:

FACTORES NO ENTRENABLES. Que vienen determinados por la herencia, que no se pueden modificar.

- La dotación genética: probablemente el factor más importante a la hora de determinar el potencial de un deportista: las características antropométricas, los rasgos cardiovasculares heredados, las proporciones de los diferentes tipos de fibra y la capacidad para mejorar con el entrenamiento.

Aunque estos factores no se puedan modificar, sí que se puede aconsejar una estrategia de entrenamiento óptima según la dotación genética de cada deportista.

FACTORES ENTRENABLES. Que se pueden modificar y mejorar.

- La cantidad y la calidad del entrenamiento: junto con la dotación genética es el otro factor que tiene un profundo efecto sobre el rendimiento físico del deportista.

Este punto es enorme y no voy a entrar en cuales son los mejores métodos de entrenamiento para cada deporte pero las variables sobre las cuales podemos entrenar y potenciar el rendimiento físico del deportista son:
  • Variable de Producción de Energía (metabolismo aeróbico, metabolismo anaeróbico aláctico, metabolismo anaeróbico láctico)
  • Variable Neuromuscular (velocidad de reacción, fuerza, técnica, coordinación…)
  • Variable Psicológica (inteligencia, personalidad, motivación…)

Cada una de las variables va a tener diferente importancia dependiendo del deporte. Por ejemplo, en un maratoniano nos interesará fundamentalmente la capacidad de utilización de energía por el metabolismo aeróbico; para un futbolista, será necesario, también, trabajar las variables neuromusculares y psicológicas...

- El estado nutricional y de salud: el rendimiento conseguido por un deportista en un momento dado puede estar condicionado por su estado nutricional y de salud. La dieta se puede considerar el entrenamiento invisible y puede suponer el 5% del rendimiento del deportista.

En otros artículos voy a hablar específicamente sobre nutrición deportiva y los efectos que tiene sobre el rendimiento físico.

- El descanso, la recuperación: es igualmente necesario el entrenamiento como la posterior recuperación para no caer en un estado de fatiga crónica y, en competición, para poder competir al 100%.

Además, el descanso entre 12 y 48 horas es imprescindible para que se realice bien la adaptación del sistema o supercompensación:


* Teoría de la supercompensación: con el ejercicio, en un primer momento hay una depleción y disminuyen los sustratos energéticos y el rendimiento. Durante la recuperación y descanso entre sesiones, con la alimentación y la hidratación volvemos a la normalidad y sufrimos una supercompensación (compensación por encima del nivel inicial). Esta vuelve a la normalidad (homeostasis) si no continuamos con el entrenamiento, nos desadaptados y volvemos al nivel procedente.


viernes, 15 de noviembre de 2013

¿PREPARACIÓN FÍSICA EN FÚTBOL BASE?

A veces quedo asustado cuando veo entrenadores que plantean ejercicios o entrenamientos puramente físicos en jugadores de fútbol base. Más que en fútbol base (que abarca hasta juvenil) me refiero a niños entre babys y alevines. En estas edades, los niños no necesitan trabajar condiciones como la resistencia o la fuerza ya que están en pleno proceso madurativo y no se darán adaptaciones a estos niveles.

Muy diferente es en cuanto a su capacidad coordinativa y técnica. En estas edades, los niños tienen un enorme potencial para aprender nuevas destrezas y movimientos, por lo cual todas las actividades técnicas con balón, coordinativas, de psicomotricidad y que impliquen fomentar su creatividad, serán adaptadas a un nivel mucho mayor que en edades más avanzadas.

A todo esto se le puede sumar que el componente lúdico será mucho mayor trabajando en este sentido por lo que un entrenamiento de fútbol, en niños, sin balón es contraproducente y además no tiene sentido.

Tampoco me sirve la excusa de “trabajar la capacidad de sufrimiento del niño” ya que, al menos bajo mi concepto, el objetivo principal del fútbol base es o debería ser el de hacer que los niños disfruten de practicar un deporte de forma que se enganchen para seguir practicándolo en un futuro; y no abandonar a las primeras de cambio a causa de este “trabajo de la capacidad de sufrimiento”.

En infantiles y sobretodo en cadetes y juveniles sí que se pueden dar adaptaciones a nivel físico, por lo que la preparación física empieza a cobrar sentido y podrá marcar diferencias, pero no antes.

Ya que estoy hablando de fútbol base, voy a mencionar algunas problemas más que, bajo mi concepto suponen una lacra inmensa para el fútbol formativo actual:

        Ganar por encima de educar

En fútbol base es frecuente ver actitudes como:

La especialización: entrenamientos semanales encarados a una especialización precoz del jugador sin dejar lugar a la experimentación y educación motriz que tiente intrínseca todo deporte
Fichajes en edades tempanas + cambios de clubes. No es raro ver chicos que a edades tempranas ya hayan cambiado de club más de una vez. Los clubes “fichan” y los padres se dejan atrapar sin pensar que lo que el crío quiere es jugar con sus amigos y pasarlo bien.
Discriminación tiempo de juego de cada niño según resultado. Aunque se predique el carácter lúdico del fútbol  desde los clubes y entrenadores, siempre se tiene cierto afán de ganar que hace que dependiendo del partido o del resultado jueguen unos críos u otros en función del nivel de cada uno.

        Entrenadores no preparados

Siempre he pensado que los mejor entrenadores, con más conocimientos, experiencia y ganas deberían entrenar a los más pequeños ya que es en estas edades cuando realmente se pueden marcar las diferencias y dónde se van a dar cambios importantes de cara al futuro del jugador.

Esta situación está cambiando ya que ahora las Federaciones Nacionales y Autonómicas están ofreciendo cursos de formación para técnicos que se están empezando a requerir como obligatorios para poder entrenar aunque sea en categorías de fútbol base.

        Influencia negativa de algunos padres

La figura de los padres puede llegar a ser un elemento de gran influencia. Muchos padres y madres, sin darse cuenta, están afectando negativamente a sus hijos. Estos padres entrometidos y con objetivos muy diferentes a los que seguramente tengan sus hijos, aportan aspectos negativos como:

Afán de ganar
Intromisión en la mentalidad de los niños
Inclusión en decisiones técnicas
Actitud “belicosa” ante rivales y árbitros.

El principio de este vídeo explica muy bien a que me refiero:


        Malas condiciones de entrenamiento

Material no acorde con la edad y nivel del practicante. Por no poseer el capital suficiente para comprar material nuevo.
Aglomeraciones. Muchos clubes quieren abarcar más niños de los que realmente pueden o deben. Este afán económico deja de lado la calidad del servicio, la educación del niño y el disfrute del deporte como tiene que ser.
Horarios desproporcionados a la edad del jugador. Relacionado con el punto anterior, muchos clubes, por no tener espacio en las instalaciones, lo que hacen es establecer horarios de entrenamiento totalmente impropios para la salud y calidad de vida del niño. Por ejemplo entrenar a las 9 de la noche, acabando así a las 10:30 sin haber comido y teniéndose que levantar la mañana siguiente para ir al colegio.

Este simpático documental sería la antítesis a todos estos problemas que arrastra el fútbol base actualmente.


lunes, 11 de noviembre de 2013

ESCALERA DE COORDINACIÓN

La escalera de coordinación es una herramienta muy útil para la mejora de la condición física global del futbolista. Aunque se trabaje sin balón, simula bien los requerimientos físicos del fútbol, tanto los que son con balón (mejora la técnica) como los que son sin balón (movimientos eficientes).

La escalera, aunque sea comúnmente conocida y utilizada para la mejora de la coordinación, en muchos casos no sirve en este sentido. Eso sucede cuando el futbolista ya conoce y domina perfectamente el ejercicio por lo que lo realiza sin pensar, de forma analítica. En este caso no se puede afirmar que se mejore la coordinación, ya que esta implica una percepción y decisión del futbolista antes de ejecutar.

Por lo tanto, para trabajar la coordinación, hay que crear problemas al futbolista para que tenga que pensar para ejecutar. Cuando no existen componentes cognitivos en un ejercicio de escalera, no se esta mejorando la coordinación, como mucho, si se ejecuta en el mínimo tiempo posible, servirá para trabajar la agilidad y velocidad. 

Pero los ejercicios en la escalera no solamente ofrecen mejoras en la coordinación o agilidad del futbolista, sino que también provoca adaptaciones a otros niveles:

  • Equilibrio dinámico. Ya que el futbolista tiene que mantener y aderezar constantemente su cuerpo ante movimientos cambiantes. 
  • Velocidad. Aunque no sirva para la mejora de la velocidad máxima, sí que se trabaja la aceleración y cambios de dirección en el mínimo tiempo posible. 
  • Fuerza específica. También se incrementa la capacidad de generar fuerza de un músculo para realizar un determinado movimiento contraponiéndose al propio peso corporal.

En este vídeo se muestran diferentes ejercicios para trabajar en la escalera:


https://www.youtube.com/watch?v=B_bbBglPGHA